martes, 19 de junio de 2012

CABILDO GENERAL ORDINARIO

La Ilma. Universidad de Curas y Hermandad de San Pedro ad Vincula celebrará Cabildo General Ordinario el próximo sábado dia 23 de Junio a partir de las 12,00 horas.
El Cabildo este año se celebrará en la Casa Sacerdotal Santa Clara.
Recordamos a todos los sacerdotes y diáconos miembros de nuestra Hermandad la obligación que tienen de asistir a este acto en el que rendiremos homenaje a los sacerdotes que este año cumplen sus bodas de oro y de plata sacerdotales.

lunes, 4 de junio de 2012

¡ DIOS ESTÁ AQUÍ !


 CORPUS EN SAN ONOFRE

Antonio Burgos – 11 de mayo de 2012 – ABC de Sevilla

Si siempre es Domingo de Ramos en la palma de la Giralda, siempre es Corpus de juncia y romero en San Onofre

Que no saque Zoido tanto pecho, porque en Sevilla hay muchos alcaldes. Según mis cuentas, por lo menos cuatro. Está el alcalde de Caballos de la plaza de los toros, cargo transmitido de generación en generación, como todos los de los empleados del coso. Esta luego el alcalde de los Negros, que es el hermano mayor de la hermandad de los Negritos. Y esta el otro alcalde de la Plaza Nueva. Si, en esta Sevilla dual por barroca, en la Plaza Nueva hay dos alcaldes: uno en la que fue Casa Grande de San Francisco, elegido por los sevillanos, y el otro, sin salir de la isabelina Plaza Nueva, plaza vieja para mi y para Juan Antonio Cavestany, en otro de los restos que allí se conservan del que fue cenobio franciscano y luego gran plaza romántica. El otro alcalde de la Plaza Nueva esta en la capilla de San Onofre, que quedó embutida en la ordenación arquitectónica del XIX tras el derribo del Convento Casa Grande de San Francisco y la urbanización de su huerta. El otro alcalde de la Plaza Nueva es el hermano mayor de la Hermandad de las Animas de San Onofre, al que de antiguo dan el titulo de Alcalde. Fundada en época fernandina, esta hermandad tiene algo que solucionaría la pesadez de ver pasar tantísimo nazareno en Semana Santa: numerus clausus, iOh, maravilla! Solo 40 sevillanos, 40 pueden ser hermanos de San Onofre, y esos puestos, como si fuera una Real Maestranza de las Benditas .Animas del Purgatorio, pasan con probanza de padres a hijos.

Entren, entren en la capilla de San Onofre, perfectamente disimulada en la arquitectura civil de la plaza, en cuya fachada un mármol reciente y reluciente proclama bajo una Custodia: «Adoración Eucarística Perpetua». Entren, entren y sientan. Silencio de manifiesto del Santísimo en el colegio, con los largos velos blancos de las niñas en el patio de la Doctrina Cristiana. Silencio de monumento eucarístico conventual el Jueves Santo en las Capuchinas. Desde fuera se oye el tranvía, los gritos de los niños que juegan, los pájaros que cantan al atardecer en las altas palmeras. Dentro, silencio de Sevilla pura. La Sevilla de la Loca del Sacramento. Una Sevilla secreta e impoluta, de cera roja y chaqués, de palios para Su Divina Majestad, de procesión pascual de balcones colgados con mantones de Manila y colchas nupciales.

Y en el silencio, la memoria me canta el viejo himno del Congreso Eucarístico de Madrid de 1911: «Dios esta aquí venid, adoradores, adoremos a Cristo Redentor». Cantemos al Amor de los Amores, porque Dios esta permanentemente, desde noviembre de 2005, en esta Custodia de San Onofre, noche y día, invierno y verano. Y 600 voluntarios vienen a adorarlo, a cumplir tumos de vela. Como una guardia de armas a lo divino en esta garita recoleta que preside la Purísima, escoltada por San Fernando y San Hermenegildo en el barroco retablo mayor de Bernardo Simón de Pineda.

Entro en San Onofre, en el atardecer de pájaros y palmeras, y hay como veinte o treinta fieles arrodillados. Portagayola de la adoración a Dios sacramentado, una larga cambiada al laicismo. ¿He dicho cuerpo de guardia de los adoradores? Quizá mejor Corpus de guardia. A mi el interior de la capilla de San Onofre, donde Dios se echa a Cuerpo en este interior de Sevilla con Custodia, me ha olido a juncia y a romero. Si siempre es Domingo de Ramos en el bronce de la palma de la Giralda, siempre es Corpus de juncia y romero en la secreta, callada, valiente adoración de la Custodia, Arfe en miniatura, seises sin violines, uva y trigo de la fe, en la capilla de San Onofre. Ya se han callado los pájaros. Hace un frescor de mañana de chaquetas blancas. Ahora se oyen las campanas de la Giralda y hasta suena «Corpus Christi» en la Banda de Soria.