jueves, 27 de diciembre de 2012

CONVIVENCIA DE NAVIDAD


CONVIVENCIA DE NAVIDAD
Universidad de curas

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28 de diciembre - Casa Sacerdotal SANTA CLARA

13,30.- Oración – Hora intermedia

14,30.- Comida - Convivencia de navidad

domingo, 16 de diciembre de 2012

! FELIZ NAVIDAD, HERMANOS ¡


Cuando llegó el día fijado por la Ley de Moisés para la purificación, llevaron al niño a Jerusalén para presentarlo al Señor, como está escrito en la Ley:

"Todo varón primogénito será consagrado al Señor".

También debían ofrecer un sacrificio un par de tórtolas o de pichones de paloma, como ordena la Ley del Señor.
Vivía entonces en Jerusalén un hombre llamado Simeón, que era justo y piadoso, y esperaba el consuelo de Israel. El Espíritu Santo estaba en él y le había revelado que no moriría antes de ver al Mesías del Señor.
Conducido por el mismo Espíritu, fue al Templo, y cuando los padres de Jesús llevaron al niño para cumplir con él lo que era costumbre según la ley, él lo tomó en sus brazos y bendijo a Dios, diciendo:

«Ahora, mi dueño, según promesa, puedes dejar a tu siervo irse en paz, porque mis ojos han visto la salvación que preparaste delante de todos los pueblos: una luz para iluminar a las naciones y gloria para tu pueblo Israel».

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La “Universidad de Curas de Sevilla y Hermandad de San Pedro ad Vincula” desea a todos los Pastores de la Iglesia Hispalense e Obispos, Presbíteros y Diáconos f una santa y feliz Navidad de Jesús. El altar del Sacrificio eucarístico, al que servimos como sacerdotes, y el tabernáculo de la Presencia del Emmanuel, serán en estos días de Navidad nuestro verdadero “Belén viviente”.

miércoles, 5 de diciembre de 2012

VOTO INMACULADISTA

DEL MISTERIO DE LA INMACULADA CONCEPCION DE LA SANTISIMA VIRGEN MARÍA NUESTRA SEÑORA


Nosotros el Rector y los hermanos de la Venerable Cofradía de Señores Sacerdotes seculares de S. Pedro Ad Víncula, erigida canónicamente en esta Iglesia Parroquial del Príncipe de los Apóstoles, siguiendo el ejemplo de los que nos han precedido desde el 19 de Junio de 1616, decimos: que aunque indignos Sacerdotes y Ministros de aquel Sumo y del todo Santo y Limpio Pontífice Cristo Jesús, y de su Esposa la Iglesia Católica, Santa, sin mancha ni arruga: por la obligación que tenemos de servir y honrar, con toda veneración y devotísima piedad, a la Santísima Virgen María, Madre de Dios, Reina Soberana de los cielos y de la tierra; pues ella es la que a nosotros los Sacerdotes nos ha dado el Pan celestial de vida y el Cordero sin mancha, que cada día ofrecemos en Sacrificio. Por tanto, para que alcancemos y merezcamos ejercer santa y dignamente el ministerio sacerdotal, y ofrecer tan santo y limpio Sacrificio con pureza de alma y cuerpo: Primeramente, en la forma y manera que por los decretos de los Sumos Pontífices y de la Santa Iglesia nos es mandado, particularmente: en la Bula de la Definición dogmática de la Inmaculada Concepción de Ntra. Sra., que empieza: Ineffabilís Deus, dada en Roma en 8 de Diciembre de1854.

Creemos y confesamos, que la verdadera y natural Concepción de la Santísima Virgen María Madre de Dios, en aquel primer instante que el Soberano Criador infundió el Alma en su Sagrado Cuerpo, de ninguna suerte le tocó, ni afeó la mancha común de la culpa original, en que incurren los demás hijos de Adán, cuando son concebidos; porque aquella Purísima Virgen siempre fue santa, siempre limpia, siempre hermosa y agradable a los divinos ojos del Señor. Y más; a Dios Todopoderoso, y a la misma Soberna Virgen Madre de Jesucristo su único Hijo, y a su Vicario en la tierra el Sumo Pontífice nuestro Smo. Padre y también al Señor D......................
Arzobispo de esta Iglesia de Sevilla, y a sus sucesores, en presencia del Sr. D................... Rector dignísimo de nuestra santa Cofradía, prometemos y juramos por los Santos Evangelios, que en todo tiempo tendremos, profesaremos y defenderemos, que la natural y verdadera Concepción de la Santísima Virgen María fue Pura y limpia y preservada de toda culpa y mancha original, y que ni de palabra, ni por escrito ni de otra manera alguna enseñaremos lo contrario. Más antes procuraremos que todos los fieles cristianos sean instruidos en tan Santa doctrina de Fe Católica, y se exhorten y animen a la profesión pública de este Misterio, como a la piadosa celebración de su misma festividad.

Sea todo, para mayor gloria de Dios y de la Santísima, Virgen su Madre, servicio de la Santa Iglesia y bien espiritual de nuestras almas. Amén.
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La precedente fórmula, que es 1a primera que tasó nuestra Hermandad, fue aprobada por el Ilmo. Sr. Don Pedro de Castro y Quiñones, Arzobispo de esta Ciudad, y se leyó por el celebrante al ofertorio de la Misa en la solemne fiesta que celebró la Hermandad en domingo 19 de Junio de 1616, en que por primera vez hizo este voto y juramento pública y solemnemente inter missarum solemnia; y desde esa época vienen haciéndolo los hermanos en el acto de su recepción; habiéndose hecho en dicha fórmula las modificaciones convenientes conformes a la bula de la Definición Dogmática.

sábado, 1 de diciembre de 2012

ADVIENTO - ESPERANZA

 
En Adviento la liturgia con frecuencia nos repite y nos asegura, como para vencer nuestra natural desconfianza, que Dios "viene": viene a estar con nosotros, en todas nuestras situaciones; viene a habitar en medio de nosotros, a vivir con nosotros y en nosotros; viene a colmar las distancias que nos dividen y nos separan; viene a reconciliarnos con él y entre nosotros.
 
Viene a la historia de la humanidad, a llamar a la puerta de cada hombre y de cada mujer de buena voluntad, para traer a las personas, a las familias y a los pueblos el don de la fraternidad, de la concordia y de la paz.
 
Por eso el Adviento es, por excelencia, el tiempo de la esperanza, en el que se invita a los creyentes en Cristo a permanecer en una espera vigilante y activa, alimentada por la oración y el compromiso concreto del amor.
Ojalá que la cercanía de la Navidad de Cristo llene el corazón de todos los cristianos de alegría, de serenidad y de paz. (Benedicto XVI - 3-12-2006)